Se dice que justicia que demora no es justicia. Años de silencio y misterio conforman este libro; que los conmoverá, los pondrá igual que a mi, abrumados y de mal genio. Compartiremos amargos sentimientos por la impotencia de ver cómo un gobierno autoritario trató por todos los medios de proteger a uno de los suyos señalado como involucrado en este crimen. Lo hicieron manipulando y entorpeciendo toda pesquisa para evitar el destape de una “olla de grillos” sobre los oscuros asuntos investigados por Valdiviezo.
Estoy seguro hoy más que nunca que quien dijo que no existe el crimen perfecto tenía toda la razón. Pero no sabía que en Ecuador el que tiene “más dinero y palancas” puede pagar y mantener la verdad fuera del alcance de la ley; utilizando mañas y artimañas para comprar a todos sin importar el costo; gastando fortunas por varios años para lograr que el crimen de Fausto Valdiviezo Moscoso se mantenga en la impunidad. Fiscales sin escrúpulos se pasaron por el forro este tema tan calientes como es el caso de Fausto; ellos han preferido callar o no investigar a pesar de que otros honestos fiscales orientaron las indagaciones contra personas claramente identificadas en este libro.
En fin, les narro la verdad sobre el asesinato de Fausto Valdiviezo, quien tenia los días contados, pues estaba cercado por dos enemigos peligrosos que querían acabar con él, solo era cuestión de quién lo hacia primero.
También es cierto que “el silencio nunca callará la verdad” y tarde o temprano se sabrá todo. Solo es necesario para algunos de nosotros, lograr superar el temor y pregonar la verdad.
Les recuerdo que en Ecuador es muy fácil eliminar pruebas, pero cuando un libro “eterniza la verdad,” no hay quien pueda ocultar los hechos.